Los pies de las personas
con diabetes son un punto diana de alteraciones que produce la propia enfermedad.
Los pacientes diabéticos se incluyen en un protocolo para valorar la
vascularización arterial y venosa de los pies, y el estado del sistema nervioso responsable de la sensibilidad y movilidad de los pies. Estas pruebas nos dan
un conocimiento del estado de afectación de los pies debido a la
diabetes. Una buena exploración periódica de los pies
prevendrá problemas a la larga.
El tratamiento de la piel y uñas de los pies diabéticos tiene que
serespecializado y realizado por un podólogo para evitar riesgos. La valoración postural, la búsqueda de puntos de presión en la planta del pie,
alteraciones articulares... son de vital importancia para plantear los tratamientos adecuados.